Inicio de semana

Buenos días mis niñas!
Espero que os fuera genial el fin de semana. A mi, respecto a la comida, no muy bien, y respecto a estado de ánimo, un tanto bipolar.
El sábado fuimos por la tarde a casa de un amigo de mi novio a bañarnos en la piscina, en plan tranqui, y tomar el sol. Nadé bastante y me lo pasé genial. Salvo por un momento en que mi novio me cayó encima de la cabeza, golpeándome la nariz y echándome todo el cuello para atrás. Me crujió todo y no sabía si hacerle caso al dolor de la nariz o al del cuello. Hoy creo que al del cuello, porque me noto dolorida y bastante rígida.
Después vimos los campeonatos nacionales de atletismo y di un masaje. El gran problema fue mi bocaza. Dije una cosa que no debería haber dicho. Era una confidencia de mi novio (aunque yo no sabía que fuera tan secreto), que me lo contó, y yo de bocas lo dije. No fue consciente, no fue planeado, me salió de la boca y punto. Cuando nos fuimos me lo echó en cara, y me dijo que no sabía si me podía decir algo más, porque todo lo suelto.
Al principio me enfadé con él, pero luego me cabreé conmigo, porque tiene razón. Primero le di un puñetazo a la pared, después a la bañera y luego un cabezazo. No sé si os pasa o solo a mi, pero cuando de verdad estoy cabreada conmigo, me tengo que auto castigar o algo así. Debo ser medio self-injure. Cuando tenía 14 años o así, tuve una depresión bastante gorda, y de vez en cuando me sentía tan mal conmigo misma que tenía que soltarlo de alguna manera. Cogía la esponja exfoliante y me frotaba hasta que me quedaba roja, o me hacía cortecitos... Me di cuenta que no era sano ni bueno, así que lo tenía controlado bastante, pero el sábado no pude evitarlo.
Me acordé que mi novio tiene un saco de boxeo en el trastero, así que me vestí y bajé a darle puñetazos y patadas. Me hice daño, pero menos. La verdad, no sé si me fastidié la muñeca o son agujetas, y el hombro. Pero al cabo de media hora ya me sentía mejor. Por lo menos conseguí dejar de sentir que soy la peor mierda del mundo.

Ayer fuimos a correr, por fin, después de una semana. Hacía muchísimo calor y mucha gente, pero lo logré. Hice algo más de media hora, esquivando coches y gente. Joder, que manía tiene la gente de no apartar cuando va alguien corriendo.
Comimos en casa de mis suegros y después volvimos a casa del amigo de mi novio. Estuvimos nadando y jugando con el balón, a pasárnoslo en el agua y así. Fue bastante ejercicio y divertido, y eso que a mi no me suelen gustar los juegos de balón ;).
Cenamos ya en su casa, y por supuesto, no mucho control, pero por lo menos no fueron cantidades gigantescas.

Ahora ya estamos bien, más o menos. No entiendo como puedo pasar de ser una persona racional, adulta y casi segura de si misma, a ser la peor cucaracha del mundo. Se supone que el ser humano, para poder evolucionar, se tuvo que querer a si mismo, tuvo que ser consciente de sus logros y querer arreglar sus fallos. Y yo queriendo morirme, simplemente.
Creo que todavía me queda mucho por trabajar con mi autoestima, pero la verdad es que no sé por donde empezar.

Cambiando de tema, mi madre me mata. Le dije que nos veríamos este finde, pero no fui ni le llamé. La pregunta es, si tanto le apetece verme, porque no me llama ella?? No lo sé. Siempre tengo que llamar yo para hablar y tengo que ir yo a casa de mis padres... En fin.

Bueno mis niñas, os dejo ya que es tarde y tengo que hacer cosas
Muchos besos